Al estilo del papa Francisco, con olor a oveja, el arzobispo metropolitano de Huancayo, monseñor Pedro Ricardo Barreto Jimeno, inició sus visitas pastorales a las parroquias más alejadas, donde se celebran las fiestas patronales y costumbristas, como el santiago, por ejemplo, para evangelizar desde una profunda religiosidad popular.

Esta semana estuvo  en el anexo de Casablanca, en las alturas de Huancayo, a más de 4 mil metros sobre el nivel del mar, donde fue recibido con bailes y vestidos típicos que representan la Tunantada y el Santiago. A los acordes de una orquesta típica, el arzobispo fue invitado a acompañar al pueblo que bailaba como es la costumbre popular. El arzobispo se cogió del brazo de sus acompañantes, entre los aplausos de los pobladores. Entre los danzarines había niños también con los atuendos típicos.

Momentos después celebró la misa en el templo del pueblo, donde con mucho cariño les dijo a los fieles que está muy bien el amor a Dios y a la Virgen, pero no deben excederse en las celebraciones, la comida y el licor. Hizo un llamado al respeto a la niñez, especialmente. “Está muy bien la alegría de un brindis, pero no más, mejor es beber chicha, como lo hacían nuestros antepasados”, dijo.

Manifestó que Junín es la región que más consume licor en el país. “Eso no debe llenarnos de orgullo, sobre todo, en estos tiempos en que se baila santiago hasta el mes de setiembre, en que se consumen miles de cajas de cerveza, cuando bien ese dinero puede usarse para alimentar a los niños y realizar obras para el pueblo”, señaló.

LA MISA

La misa en honor de la Virgen de Fátima fue mandada celebrar por la mayordoma Victoria Huamán viuda de Saforas, Josmel Saforas Huamán y Luciana Saforas Yachi, por la salud de la población, especialmente de Victoria Párraga Olivera y de su hijo Rony Sanabria Párraga, quien sufrió un accidente y ahora se recupera.

Durante su mensaje se alegró que ahora abunde el agua en Casablanca. Antes no tenía, pero el pueblo se unió para contar con este servicio. Ahora lo tienen e insistió en que sigan unidos para que hagan más obras.

Asimismo, felicitó a los fieles por su contribución al mejoramiento de la capilla que se encuentra bien conservada.

Después de la misa se procedió a la procesión y a los bailes costumbristas de la Tunantada y de otras estampas, con la recomendación del arzobispo de no a los excesos. La fiesta dura varios días con un variado programa.

VISITAS PASTORALES

Monseñor Barreto realiza sus visitas pastorales de este año como todos los años para dar cuenta al papa, el viernes 7estuvo en la localidad de Chupuro donde se celebra la fiesta del Señor de la Caña, el sábado en Matahuasi, en el retiro de catequistas y el domingo en la parroquia Santa Fe de Jauja;  y en los próximos días acompañará las peregrinaciones a la Virgen de Cocharcas en todo el valle del Mantaro y en el valle del Canipaco, donde hay una profunda devoción a la Virgen patrona de la región.